No hay fórmulas mágicas, en muchos casos como en el mío fue ensayo y error, tengo dos hijas gemelas, una ha tenido rabietas y la otra no, ¿Será porque gestiona mejor su frustración? o ¿Porque la etapa todavía no le ha llegado?, tal vez nunca llegue… al fin y al cabo no todos los niños nos iguales.
Directo al grano
Plantear mal una rabieta
- Gritar tú más alto
- Amenazar
- Ridiculizar
- Negociar con premios
- Sujetar e inmovilizar
- Echar filípicas interminables
- Pegar
Ninguna me sirvió de nada, menos pegar las use casi todas, muy al principio, cuando no sabía muy bien por donde venían los tiros. En internet poca solución había, y de lo que me encontraba eran cursos en los que había que pagar para que te revelarán la verdad universal.
De unos sitios y otros fui cogiendo aquello que veía que tenía más coherencia e iba con el carácter mio y de mi hija.
La rabieta
Durante la rabieta mi hija se desconecta por completo, he leído que pueden llegar hasta autolesionarse, mi hija no, aunque su reacción no parece de este mundo: llora, grita, se revuelve, te araña y te muerde. Para mi es como una experiencia astral en la que ves a alguien a quien no reconoces y a quien no sabes muy bien qué decir o qué hacer para sacarla del estado en el que está.
Tienes que tenerlo muy claro, no eres TÚ quien lo está pasando mal, es ella.
A menudo tras las rabietas, sobre todo si duran más de 20 minutos, se duerme exhausta, y ha habido veces que tras las siesta como si hubiera sido una breve pausa sigue a la carga pero con menos fuelle.
Con esto quiero decir que no sabes como empieza y ni cómo van a acabar, mi hija ha tenido rabietas, por haber cogido yo unas escaleras mecánicas sin ella de la mano (cuando se la ofrezco, me dice: “yo sola”, cuando no se la ofrezco, monta la de dios….), por salirme de un supermercado cuando ella quería seguir comprando, aterrizando en un avión, por subirme de la piscina, por querer un biberón de madrugada….
La gente (por lo general) no entiende una rabieta
De todas las sufridas, solo me ha ocurrido una vez y fue uno de los peores momentos de mi vida, y no por mi hija, sino por la pérdida de fé en la humanidad, la falta de compasión por parte de las mujeres y la inexistente empatía de una madre. Si tenéis cuerpo podéis leer mi experiencia aquí.
Así que en parte esta es la razón de este post, para que estés preparad@ no solo para enfrentarte a tus hijos sino a los demás.
He leido de gente que pide que aparten al niño enrabietado del pasillo del supermercado o le pasan con el carrito por encima…. Merece la pena que si alguna vez véis por facebook algun post sobre rabietas… leais los comentarios de la gente, leeréis historias que os harán plantearos si vivis en un mundo con sentimientos.
Ante una falta total de empatía por parte de la gente de tu alrededor, no cabe otra que mantener la calma… que tú le arrancarías la cabeza y le darías con ella… sí, pero tu hij@ no puede ver eso ni puede intuir siquiera tus sentimientos. Lo que sí verá será la mirada de odio de ese tercero hacia ti y hacia él, Y ESO lo tendrás que explicar después: que esa mirada era contra mamá, que esa persona estaba enfadada con mamá y no con él.
Si eres de los que insultan de usted, me alegro enormemente y espero le des toda una lección de humanidad a ese ser desaprensivo al más puro estilo Reverte.
Como entra tu hijo y sales tú de una rabieta
Nunca me ha funcionado la misma cosa dos veces, es ir probando, combinaciones, sin dar tu brazo a torcer, porque si lo haces sabrá hasta qué punto tiene que llegar para conseguir lo que quieren.
Anticípate
Antes de todo como norma general de convivencia: habla con tus hijos, explícales el plan, diles que vais a ir a casa de unos amigos que tienen un perro, que vais a ir a la compra pero que hay que volverse pronto porque vienen los abuelos a comer, que vais a tomar un avión que aterriza y despega con mucha gente dentro, que van a ir al medico y que van a tener que desvestirse… No se lo contamos, no hablamos con ellos, no les anticipamos lo que va a suceder, tú lo sabes ellos no, y luego esperas que estén tranquilos ante una situación que entienden desconocida o les da miedo.
Yo he llegado a la conclusión de que verdaderamente una rabieta es a un niño lo que un ataque de ansiedad a un adulto.
Dejarle espacio
El suficiente para que te sientan cerca y asegurar que no se hacen daño y el necesario para que no se sientan agobiados.
A veces solo tienes que estar a su lado 10 minutos hasta que amaine, te parecerá una eternidad, pero es el tiempo que tarda su cerebro en volver a conectar con la realidad, sabrás reconocerlo porque aunque la rabieta sigue ya te deja que le toques.
Bajar a su nivel
En cuclillas y háblale a la cara, tranquilo, haciéndole consciente de que te pone muy triste que esté así de nervioso, que no sabes como ayudarle, intenta razonar brevemente sin grandes sermones.
Coger en brazos
En cuanto te deje que le cojas: arrullarlo y cantarle su nana favorita.
Parecen de película pero frases como: todo está bien, todo va a salir bien, no hay peligro, no tengas miedo, estoy aquí, no me voy a ir nunca… etc son de gran ayuda, y aunque creas que no te escuchan, lo hacen porque luego repiten después algunas cosas para tranquilizarse ellos mismos como un mantra.
En algunos libros como El gran libro de los gemelos, tienes capítulos dedicados, si te gusta anticiparte, es un buen libro.
Conclusiones
Unas 10 rabietas ha tenido mi hija, y desde este agosto cero. Alguna vez se pone ñoña por algo pero sin llegar al drama, ¿significa eso que ya ha pasado la fase? no lo sé, ¿10 es un número suficiente de experiencias como para que su pequeño cerebro aprenda a gestionar la frustración?, no lo sé, ¿ha ayudado la entrada en el cole a ser más adaptable y a aceptar que esto es lo que hay?, no lo sé… Mi otra hija que no ha tenido ninguna, ¿significa que ya sabe gestionar su ira? no lo sé.
Lo que sí sé es lo que no funciona y son las 7 cosas que no sirven para nada en una rabieta: Gritar tú más alto, Amenazar, Ridiculizar, Negociar con premios, Sujetar e inmovilizar, Echar filípicas interminables, o Pegar.
Espero sinceramente haberte ayudado y solo desearte mucho ánimo, paciencia y empatía: ponte siempre en el lugar de tu hijo intentando comprender, qué es lo que le ha llevado a esa situación.
Ana Colomé
Totalmente de acuerdo. Mi peque grande ha sido de 3 rabietas contadas y el pequeño aún tiene el marcador a 0. Pero está claro que cuando están en medio del berrinche solo puedes esperar y decir palabras de apoyo hasta que te dejen acercarte, ese fue mi caso al menos. Yo ahora estoy en la fase de los enfados y la desobediencia, para ello te recomiendo el libro Disciplina sin Lágrimas, ayuda a entender su firma de actuar y te da herramientas para gestionarlo. Feliz lunes!
MNG
lo leeré sin duda, mejor que me pille preparada!