Últimamente leo mucho sobre los padres helicóptero, que creo que los llaman padres helicóptero porque mosca cojonera no es un término muy Montessori, e imagino que si algún padre está orgulloso de serlo es mejor decir:
Sí, soy un padre helicóptero, que no, sí, soy una mosca cojonera.
Postureo nada más.
Pues bien, ahora a lo de meterse en tu vida se llama ser helicóptero. Puedes tener amigos helicóptero, cuñadas helicóptero, jefes helicóptero… así de los que te sobrevuelan la nuca al ras…
Recomiendo la lectura del siguiente post para profundizar más en los elementos del entorno:
Yo es que soy muy de vive y déjame dormir… A ver que también doy mi opinión si me la piden y a mis hijas les digo: «Mirad a ver esa piedra que os vais a dar en los morros…» Pero dejo margen.
Pienso que del fracaso controlado también se aprende, así que doy un poquito de margen a la equivocación. Porque si de algo habla vida es de equivocaciones y de superar situaciones complicadas. No resuelvas sus problemas, dales las herramientas para que los resuelvan por ellos mismos. El quítate que ya lo hago yo a mí me parece un error como la copa de un pino.
Directo al grano
Proteger a tus hijos de todos los males es inhumano e imposible
Nadie queremos que se metan con nuestro hijo. La crueldad es parte de la raza humana y cuando decimos la frase: «Que crueles son los niños» es porque lo son, y mobbing a parte, que un tema muy serio, creo que de alguna forma esa minicrueldad por llamarla de alguna manera les auto-prepara para gestionar esa crueldad en vivo que hará que sean futuros supervivientes sociales.
Encajar esas criticas
Es materialmente imposible que tu hijo no reciba una crítica o un desprecio por parte de su entorno en algún momento de su vida. Que nos gustaría a todos vivir en la aldea del Arce o con David el gnomo todos en amor y armonía, cantando y abrazándonos, pues sí, pero no. Puedes educar a tus hijos en la tolerancia, el respeto, en no abrir la boca si no es para ayudar, en ser consecuentes con las cosas que dicen y hacen, pero es inevitable, habrá un momento el el que se sentirán frustrados y harán daño (incluso a ti) o recibirán criticas y tendrán que encajarlas.
El trabajo de la autoestima
Sabemos que el entorno es cruel, queremos proteger a nuestros hijos, démosles las herramientas para gestionar situaciones difíciles. Desarrollemos su autoestima. Para ello los ejemplos en casa: Si no te quieres tú mismo, olvídate de que tus hijos se quieran a ellos mismos. No es tema fácil, si no sabes ni por dónde empezar lee, hay que quererse a uno mismo y mucho.
Ser social en sociedad
Padres agobiados porque sus hijos no sean los margis. Padres que se apuntan a un bombardeo, a todos los cumpleaños, preguntando a sus hijos cuantos amigos tienen, abriendo y cerrando agendas con otros padres a ver si sus hijos se caen bien.
Que tu hijo tiene un solo amigo: Saltan las alarmas.
Que tu hijo tenga un solo amigo es normal y que tenga 12 también, y que haya días que le gusta remover el barro solo a su bola sin tener que discutir con nadie por la pala en el jardín de infancia, también. Seamos naturales, dejemos las cosas fluir, estemos ahí sin estar… como la NSA.
Como no sabemos cómo va a ser el futuro, les preparamos para todo
Que obsesión con ser el número uno, con lo cómodo que se está de número dos moviendo los hilos en la sombra. ¿Es que no os han enseñado nada las pelis americanas? El héroe muere y es el amigo el que se encarga de recordarle en escena final heroica… ¿No?
Pues eso, nada de héroes protagonistas… personaje secundario, ese que no da problemas, el que va a su rollo, enterándose de lo que pasa y moviéndose por el borde. Sin destacar, personita gris. ¿Por qué queremos números uno? ¡Qué sufrimiento!
¿De qué sirve apuntarle a música si no muestra el mayor interés? ¿O a clases de funky si le da vergüenza bailar?.
Qué pasa, que has leído que la danza desarrolla sus cualidades de posicionamiento GPS y equilibrio. No me jodas.
Yo quiero que aprendan una arte marcial. Yo-quiero. Ni idea de lo que van a querer ellas. Si me dicen que les llama la atención hacer yemas con las monjas teresianas pues harán yemas con las monjas teresianas, y aquí estoy tranquilita a ful con la repostería y mi Gin & Tonic.
En las cenas a menudo hablamos sobre las extra-escolares que hacen sus compañeros. Si dicen judo salto con júbilo… Y digo: ¡Un arte marcial me encanta! A lo mejor os gustaría… Preguntarle a fulanito como se lo pasa en clase… Contestaciones: una se calla y la otra dice prefiero estar con mamá y papá. Pues nada.
No creo que haya que apuntarles a todo para ver qué les gusta o se les da bien… Es más bien ver que les va llamando la atención, y dirigir, sin perder los papeles montando una tienda de campaña a las puertas de la mejor escuela de música de la capital.
Cubrir el expediente
Hasta los huevos de oír, es que tu hija es de sobresaliente… Es que tu hija tiene un coco de 14… Es como obsesionarte con los percentiles de crecimiento durante el primer año. ¿De verdad merece la pena exigir tanto expediente a los niños? ¿Para qué dejarte los huevos si luego vas a poner cafés en un Starbucks con tu título universitario? ¿No es mejor ir viendo cómo va el tema y pillar la ola?
Leo que el 70 % de los trabajos desaparecerán en los próximos años, trabajos como el tuyo y el mío, el de mesita y ordenador de 9am a 6pm. Así que ¿Para qué estamos acostumbrando a los niños a hincar codos y estar sentados 9 horas al día? A lo mejor la pregunta no es qué quieren ser de mayores, como si sólo hubiera una carrera, a lo mejor hay que prepararse para ser multidisciplinar y si en tu ciudad o país no hay oportunidades… ir a donde quieres desarrollar tu(s) vida(s) profesional(es).
Yo por ejemplo, estoy muy pro de que elijan un país con oportunidades y al ser posible con palmeras?, mientras yo me centro a saco en ser una digital nomad con las aletas de buceo puestas.
Adelantar todo un lustro
Todos los amigos de mis hijas montan en bici sin ruedines desde hace un año, bien mi marido y yo estuvimos haciendo un esfuerzo memorable para acordarnos a que edad empezamos a montar en bici sin ruedines… Después de un rato acordamos que no nos acordábamos, pero que 5 años cómo tienen nuestras hijas, que no.
¿Qué pasa ahora? ¿Por qué ver un niño de 5 años con ruedines produce risa y piensas: Mira uno fuera del percentil?
Llevamos semanas con el tema nosotros aprendimos en una tarde porque éramos mayores tendríamos mejor equilibrio, mis hijas se desesperan… Y yo venga a decir que los procesos de aprendizaje a veces son lentos que hay que tener paciencia y no venirse a abajo. Me encojono de oírme: No me lo creo ni yo… Albergo la esperanza de que se aburran de la pastelera bici y le den a los patines, por su paz mental y mi salud lumbar.
Te Equivocas. Sí ¿Y qué? Pues rectificas
Joder que angustia, es que parece que tenemos una una oportunidad en la vida con nuestros hijos y como la cagues pues volvemos a la casilla de inicio… Bueno pues no.
Hay que saber gestionar la culpa y los juicios de los demás, porque opiniones hay como narices, todo el mundo tiene una. Hbaer si de tanto intentar encajar desaparecemos como en el tetris.
Se equivocan ellos y tú. Pues siguiente intento. Te levantas, te sacudes el polvo y sigues.
Soy un padre helicóptero
No, en serio haztelo mirar, que coñazo, eres su padre, por el amor de dios… eres quien le sopla las pupas, no el asistente del Google, no tienes que recomendarle restaurantes, ni hacer trabajos, ni meterte en conversaciones, ni preaprobar sus amistades.
Búscate un hobbie, deja de proyectarte sobre tus hijos.
Soy un hijo de padres helicóptero
Nada tranqui, se supera como todo, solo tienes que poner entre tu padre helicóptero y tú un muro como el de juego de tronos con toda la guardia de la noche de punta. Y listo. También puedes pedir que te devuelvan la llave esa que les dejaste para que dieran de comer al gato mientras estabas de vacaciones, y que usan para entrar a tu casa cuando les sale del moño desde entonces.
Hay que cortar el cordón umbilical, recordarles que las decisiones en tu vida ya no las tomas con ellos, sino con tu pareja si la tienes, o por ti mismo que eres el principal afectado.
No confundir con pedir o dar consejos, creo que todos sabemos qué se siente cuando se meten en nuestra vida o nos hemos metido donde no nos han llamado y nos lo han dicho sutilmente… Pues de adulto igual que con tus hijos, sabiendo que el lazo que te une a ellos es salvajemente protector, es muy sano soplar sus pupas en vez de estar permanentemente advirtiéndoles su caída.
¡Feliz Gin & Tonic!
¡Mucho más en mi Instagram!
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